Amundsen-Scott: Duelo en la Antártida

25/03/2012
Angel Suarez
¿Dónde nace la idea de escribir “Amundsen-Scott: Duelo en la Antártida”? Llevo muchos años interesándome y recopilando información sobre los primeros exploradores antárticos, pero fueron mis amigos quienes me animaron -aprovechando que iba a ser el centenario de la carrera- a poner por escrito las historias que yo les había contado sobre la antártica y los hombres que se atrevieron a acercarse a aquella Terra Incognita desafiando todos sus peligros.
¿ Qué encontrará el lector en este libro? Es la historia de un gran desafío, la última gran aventura que le quedaba al ser humano sobre el planeta: alcanzar el único punto significativo de la Tierra que faltaba por explorar. Un viaje por unas zonas completamente desiertas, que no ofrecen el más mínimo recurso para la vida y por lo tanto no hay ni rastro de animales ni de plantas. Un viaje de 3000 kilómetros por un territorio desconocido, teniendo que enfrentar una naturaleza inmisericorde que nunca perdona la más mínima equivocación. Un viaje de, unos cuatro meses de duración, en el que no podían contar con ayuda de nadie, todo los problemas los tenían que resolver por ellos mismos, dado que no existía la radio para poder solicitar ayuda.
Una aventura que se puede escribir con mayúsculas y que además se convirtió en una competición entre dos equipos de hombres, los británicos capitaneados por Scott, y los noruegos liderados por Amundsen. Una competición entre hombres de diferentes países, culturas, preparación y trayectorias profesionales, que lucharon denodadamente para alzarse con la victoria y volver a su país con el trofeo de la conquista del polo Sur.
Una historia de ambiciones, de sueños, de mezquindades y de generosidad. En definitiva la historia de unos héroes tan débiles y fuertes, tan valientes y cobardes, tan hipócritas y veraces como la mayoría de nosotros –como dice Manuel Toharia en la introducción del libro- pero que tuvieron el tesón fuera de toda norma, capaz de llevarles a realizar unas hazañas que nos están vedadas a casi todos sus congéneres...
En su opinión ¿Qué impulsa al hombre a hacer lo que Amundsen y Scott? La curiosidad, somos un ser curioso por naturaleza. Y ese deseo de saber es lo que hizo que el hombre primitivo se preguntase por lo que había detrás de las montañas que rodeaban el valle donde vivía. Y esa curiosidad es lo que ha seguido impulsando a todos los exploradores grandes o pequeños de la historia de la humanidad. Llevamos algo dentro que nos ha llevado a recorrer hasta el último de los rincones de nuestro planeta, que nos ha llevado a la Luna y que nos llevará a Marte… y puede que a las estrellas.
¿ Quién continúa con este espíritu aventurero hoy día ? ¿ Quién podríamos nombrar que estuviera a la altura de los clásicos ?
No creo que sea el momento de dar nombres de escaladores, montañeros o aventureros (en el sentido más noble de la palabra), seguro que me dejaría a alguno que se lo mereciese tanto o más de los que nombrase. Pero sí quisiera decir quiénes son los que continúan con ese espíritu aventurero hoy en día: los científicos.
Sé que puede parecer desconcertante, pero también a ellos la curiosidad les mueve a hacerse preguntas, lógicamente ya no van a preguntarse qué hay detrás de esas montañas, para eso tenemos los satélites que lo observan todo desde el espacio, pero es la misma curiosidad lo que les hace preguntarse por los secretos de la naturaleza en todos los campos de la ciencia. Y también ellos afrontan el desafío de internarse por senderos completamente desconocidos para el saber humano. Y también enfrentan los peligros de la incomprensión de sus conciudadanos, de las dificultades económicas y en estos momentos de los recortes debido a la crisis.
Y algunos de ellos van a la Antártida buscando allí las respuestas a sus preguntas y enfrentan allí el mismo entorno adverso que enfrentaron Amundsen y Scott, el clima más extremo del planeta y –pese a todos los avances de la tecnología- la misma soledad y el miedo.
Y podría extender aún más la respuesta para incluir a todos las personas del planeta con capacidad para la creación, para todos los que sienten la necesidad de salirse de la repetición rutinaria. También ellos están tras la búsqueda de las respuestas a las preguntas que su curiosidad les hace. Son otro tipo de aventureros, aventureros del saber. Puede que no tengan tanto glamour como un escalador que se atreve a subir al Annapurna, que puedo asegurar que afrontan peligros parecidos, que por ser intelectuales no son menos reales.
¿ Hoy día, tras tanto años de su conquista ¿ Conocemos realmente el Polo Sur?
Conocemos dónde está el Polo Sur, al igual que ahora conocemos muchas cosas sobre la Antártida, pero la naturaleza es como una cebolla, quitamos una capa y siempre hay otra más interior. Por supuesto que ahora podemos responder a muchas preguntas que aquellos primeros exploradores se planteaban, pero todavía nos queda mucho por conocer de la meteorología, de la interacción sobre el clima del planeta, de su cobertura helada actualmente amenazada por el calentamiento del planeta, de las adaptaciones de las especies animales han tenido que hacer para adaptarse a las duras condiciones de la Antártida y donde la vida siempre se encuentra al límite.
Y así podría seguir, con la importancia de los estudios geológicos que allí se llevan a cabo para comprender la evolución del planeta, o explicar que en sus entrañas del hielo se encuentra la historia del clima de la Tierra… muchos, muchos temas que obligarán a que cada año -siguiendo los pasos de esos grandes exploradores y con su mismo espíritu de descubrir y de saber- científicos de un buen grupo de países, entre los que se encuentran investigadores españoles, vuelvan a aquel continente helado a desafiar las peores condiciones climáticas del planeta.
¿ Qué sensaciones le gustaría despertar entre los lectores de esta obra ?
Quisiera despertar sólo una, la de respeto. Respeto por Amundsen, respeto por Scott, respeto por aquellos hombres que, con las limitaciones que comentábamos antes, escribieron una de las grandes páginas de la historia de la humanidad.
Vivimos en una etapa peculiar, se ha afincado en nosotros la perversa manía de analizar de forma exhaustiva y casi enfermiza el comportamiento todas las personas hasta que creemos haber detectado sus razones más íntimas para obrar como lo hicieron. Y nuestros dos exploradores no han escapado a esa fiebre inquisidora, de tal manera que parece que estamos divididos entre los partidarios de Scott y los seguidores de Amundsen. Y una y otra vez, tanto los unos como los otros arremeten con redoblados argumentos sobre los que consideran los contrarios.
Yo, en mi libro, he tratado de tratarlos a los dos con el respeto que se merecen. He realizado un retrato psicológico de los personajes que puede darnos pistas sobre su modo de actuar, pero he querido que por encima de sus errores y aciertos, logros y equivocaciones prevaleciese el respeto hacia unas personas que, también como decíamos antes, se atrevieron a enfrentar un desafío titánico. Para que nuestros lectores se hagan una idea, después de las expediciones de Amundsen y Scott al Polo, tuvieron que pasar casi 50 años para que el conquistador del Everest se atreviera a recorrer de nuevo sus pasos. Y cuando lo hizo, se sirvió de vehículos motorizados, apoyo aéreo y estuvo en todo momento conectado con el mundo exterior. Un abismo en comparación con lo que tuvieron que afrontar nuestros dos héroes.
¿ Dónde puede nuestra audiencia conseguir “Amundsen-Scott: Duelo en la Antártida” ?
No creo que en las islas sea difícil de encontrar, en la Península ha tenido una amplia difusión y en estos momentos se está preparando la cuarta edición. Luego creo que será sencillo encontrarlo en librerías y bibliotecas públicas, y en caso de que no lo tengan, los libreros pueden solicitarlo y tenerlos en unos días. Además, estamos en la era de la comunicación, a través de la web y contactando con la editorial podrán indicarse cómo conseguirlo. No, no creo que sea difícil.
El 12 de abril de 2012, Javier Cacho y el periodista, filósofo y escritor Javier Pérez Reverte, disertarán en Tenerife acerca del calentamiento global, el deshielo y sus efectos en los océanos dentro de La segunda edición del foro "Enciende la Tierra", que organiza la Obra Social de CajaCanarias.
Angel Suarez
¿Dónde nace la idea de escribir “Amundsen-Scott: Duelo en la Antártida”? Llevo muchos años interesándome y recopilando información sobre los primeros exploradores antárticos, pero fueron mis amigos quienes me animaron -aprovechando que iba a ser el centenario de la carrera- a poner por escrito las historias que yo les había contado sobre la antártica y los hombres que se atrevieron a acercarse a aquella Terra Incognita desafiando todos sus peligros.
¿ Qué encontrará el lector en este libro? Es la historia de un gran desafío, la última gran aventura que le quedaba al ser humano sobre el planeta: alcanzar el único punto significativo de la Tierra que faltaba por explorar. Un viaje por unas zonas completamente desiertas, que no ofrecen el más mínimo recurso para la vida y por lo tanto no hay ni rastro de animales ni de plantas. Un viaje de 3000 kilómetros por un territorio desconocido, teniendo que enfrentar una naturaleza inmisericorde que nunca perdona la más mínima equivocación. Un viaje de, unos cuatro meses de duración, en el que no podían contar con ayuda de nadie, todo los problemas los tenían que resolver por ellos mismos, dado que no existía la radio para poder solicitar ayuda.
Una aventura que se puede escribir con mayúsculas y que además se convirtió en una competición entre dos equipos de hombres, los británicos capitaneados por Scott, y los noruegos liderados por Amundsen. Una competición entre hombres de diferentes países, culturas, preparación y trayectorias profesionales, que lucharon denodadamente para alzarse con la victoria y volver a su país con el trofeo de la conquista del polo Sur.
Una historia de ambiciones, de sueños, de mezquindades y de generosidad. En definitiva la historia de unos héroes tan débiles y fuertes, tan valientes y cobardes, tan hipócritas y veraces como la mayoría de nosotros –como dice Manuel Toharia en la introducción del libro- pero que tuvieron el tesón fuera de toda norma, capaz de llevarles a realizar unas hazañas que nos están vedadas a casi todos sus congéneres...
En su opinión ¿Qué impulsa al hombre a hacer lo que Amundsen y Scott? La curiosidad, somos un ser curioso por naturaleza. Y ese deseo de saber es lo que hizo que el hombre primitivo se preguntase por lo que había detrás de las montañas que rodeaban el valle donde vivía. Y esa curiosidad es lo que ha seguido impulsando a todos los exploradores grandes o pequeños de la historia de la humanidad. Llevamos algo dentro que nos ha llevado a recorrer hasta el último de los rincones de nuestro planeta, que nos ha llevado a la Luna y que nos llevará a Marte… y puede que a las estrellas.
¿ Quién continúa con este espíritu aventurero hoy día ? ¿ Quién podríamos nombrar que estuviera a la altura de los clásicos ?
No creo que sea el momento de dar nombres de escaladores, montañeros o aventureros (en el sentido más noble de la palabra), seguro que me dejaría a alguno que se lo mereciese tanto o más de los que nombrase. Pero sí quisiera decir quiénes son los que continúan con ese espíritu aventurero hoy en día: los científicos.
Sé que puede parecer desconcertante, pero también a ellos la curiosidad les mueve a hacerse preguntas, lógicamente ya no van a preguntarse qué hay detrás de esas montañas, para eso tenemos los satélites que lo observan todo desde el espacio, pero es la misma curiosidad lo que les hace preguntarse por los secretos de la naturaleza en todos los campos de la ciencia. Y también ellos afrontan el desafío de internarse por senderos completamente desconocidos para el saber humano. Y también enfrentan los peligros de la incomprensión de sus conciudadanos, de las dificultades económicas y en estos momentos de los recortes debido a la crisis.
Y algunos de ellos van a la Antártida buscando allí las respuestas a sus preguntas y enfrentan allí el mismo entorno adverso que enfrentaron Amundsen y Scott, el clima más extremo del planeta y –pese a todos los avances de la tecnología- la misma soledad y el miedo.
Y podría extender aún más la respuesta para incluir a todos las personas del planeta con capacidad para la creación, para todos los que sienten la necesidad de salirse de la repetición rutinaria. También ellos están tras la búsqueda de las respuestas a las preguntas que su curiosidad les hace. Son otro tipo de aventureros, aventureros del saber. Puede que no tengan tanto glamour como un escalador que se atreve a subir al Annapurna, que puedo asegurar que afrontan peligros parecidos, que por ser intelectuales no son menos reales.
¿ Hoy día, tras tanto años de su conquista ¿ Conocemos realmente el Polo Sur?
Conocemos dónde está el Polo Sur, al igual que ahora conocemos muchas cosas sobre la Antártida, pero la naturaleza es como una cebolla, quitamos una capa y siempre hay otra más interior. Por supuesto que ahora podemos responder a muchas preguntas que aquellos primeros exploradores se planteaban, pero todavía nos queda mucho por conocer de la meteorología, de la interacción sobre el clima del planeta, de su cobertura helada actualmente amenazada por el calentamiento del planeta, de las adaptaciones de las especies animales han tenido que hacer para adaptarse a las duras condiciones de la Antártida y donde la vida siempre se encuentra al límite.
Y así podría seguir, con la importancia de los estudios geológicos que allí se llevan a cabo para comprender la evolución del planeta, o explicar que en sus entrañas del hielo se encuentra la historia del clima de la Tierra… muchos, muchos temas que obligarán a que cada año -siguiendo los pasos de esos grandes exploradores y con su mismo espíritu de descubrir y de saber- científicos de un buen grupo de países, entre los que se encuentran investigadores españoles, vuelvan a aquel continente helado a desafiar las peores condiciones climáticas del planeta.
¿ Qué sensaciones le gustaría despertar entre los lectores de esta obra ?
Quisiera despertar sólo una, la de respeto. Respeto por Amundsen, respeto por Scott, respeto por aquellos hombres que, con las limitaciones que comentábamos antes, escribieron una de las grandes páginas de la historia de la humanidad.
Vivimos en una etapa peculiar, se ha afincado en nosotros la perversa manía de analizar de forma exhaustiva y casi enfermiza el comportamiento todas las personas hasta que creemos haber detectado sus razones más íntimas para obrar como lo hicieron. Y nuestros dos exploradores no han escapado a esa fiebre inquisidora, de tal manera que parece que estamos divididos entre los partidarios de Scott y los seguidores de Amundsen. Y una y otra vez, tanto los unos como los otros arremeten con redoblados argumentos sobre los que consideran los contrarios.
Yo, en mi libro, he tratado de tratarlos a los dos con el respeto que se merecen. He realizado un retrato psicológico de los personajes que puede darnos pistas sobre su modo de actuar, pero he querido que por encima de sus errores y aciertos, logros y equivocaciones prevaleciese el respeto hacia unas personas que, también como decíamos antes, se atrevieron a enfrentar un desafío titánico. Para que nuestros lectores se hagan una idea, después de las expediciones de Amundsen y Scott al Polo, tuvieron que pasar casi 50 años para que el conquistador del Everest se atreviera a recorrer de nuevo sus pasos. Y cuando lo hizo, se sirvió de vehículos motorizados, apoyo aéreo y estuvo en todo momento conectado con el mundo exterior. Un abismo en comparación con lo que tuvieron que afrontar nuestros dos héroes.
¿ Dónde puede nuestra audiencia conseguir “Amundsen-Scott: Duelo en la Antártida” ?
No creo que en las islas sea difícil de encontrar, en la Península ha tenido una amplia difusión y en estos momentos se está preparando la cuarta edición. Luego creo que será sencillo encontrarlo en librerías y bibliotecas públicas, y en caso de que no lo tengan, los libreros pueden solicitarlo y tenerlos en unos días. Además, estamos en la era de la comunicación, a través de la web y contactando con la editorial podrán indicarse cómo conseguirlo. No, no creo que sea difícil.
El 12 de abril de 2012, Javier Cacho y el periodista, filósofo y escritor Javier Pérez Reverte, disertarán en Tenerife acerca del calentamiento global, el deshielo y sus efectos en los océanos dentro de La segunda edición del foro "Enciende la Tierra", que organiza la Obra Social de CajaCanarias.